El bronce olímpico en dobles se une al pasado título del Mutua Madrid Open
En muy pocas de las famosas ‘quinielas de medallas’ para París 2024 se contaba la de Sara Sorribes y Cristina tuerca. Sin embargo, las campeonas del Mutua Madrid Open, un dúo de grandes doblistas que consiguen buenos resultados en el circuito aunque con parejas diferentes, han jugado un torneo casi perfecto que puede simbolizarse en su final por el bronce ante Muchova y Noskova: siempre concentradas sin descomponerse en ningún momento, ganaron con la autoridad de un 6-2 y 6-2 su final por el bronce olímpico.
«Hemos voleado las dos superbien y hemos podido aguantar todas las bolas» -declaró Sara a Radio MARCA apenas acabado el partido- mientras Cristina apostillaba que «desde que salimos de la pista tras perder las semifinales yo sabía que el doble era nuestro, que teníamos muchas opciones. Estaba muy segura». Sorribes recordó que «yo no tenía claro siquiera si iba a venir a los Juegos Olímpicos hasta el último momento» mientras Cristina decía que «yo siempre imagino que las cosas saldrán como quiero y así han salido».
En su gran momento de triunfo, Sara recordó que en los inicios de su carrera «lo único que quería era ser tenista, vivir de ello, disfrutar de mi pasión y lo he conseguido. Mi carrera ha sido mejor de lo que hubiese soñado. Esta medalla es el sueño de toda una vida. Yo me considero una niña que le gusta el tenis, que ha ido haciendo camino, una privilegiada por poder competir en lo que le gusta disfrutar de quedo estoy sana y feliz. Ganar esta medalla en el momento en el que estoy me hace estar súper agradecida».
Cristina tuerca recordó a su familia y en especial a su padre, que fue olímpico en biatlón en Nagano y en Salt Lake City, que la impulsó en su carrera de tenista y es su entrenador: «Estoy muy orgullosa de mi familia, de este gran éxito. Hemos trabajado mucho desde que soy una niña y mi familia siempre ha estado detrás de mí. Estoy orgullosa del espíritu de lucha que me inculcó mi padre y muy agradecida a todos los que me han ayudado que no han dejado de creer en mí. Ganar una medalla es el premio a todo el trabajo que hemos hecho, con nuestros entrenadores. Estoy muy agradecida de estar aquí y de haberla conseguido».
Sara Sorribes, castellonense, de Vall d’Uxó y de 27 años de edad, fue campeona de España en todas las categorías de formación y es la tenista española más joven en lograr un punto WTA: a los 14 años y cinco meses. Se asentó en el circuito a partir de 2014 y desde entonces ha llevado una trayectoria, a caballo de los Circuitos WTA e ITF, que la ha mantenido con regularidad en las 50 mejores de la WTA aunque ha tenido, también, que lidiar con varios periodos de lesiones como una de tobillo especialmente persistente la pasada temporada. Siempre fue buena doblista pero ha sido en las últimas temporadas cuando ha conseguido mejores éxitos en la modalidad por parejas: sus dos últimos títulos han sido el WTA 1.000 de Pekín en 2023, con Bouzkova, y el Mutua Madrid Open 2023 junto a Bucsa.