Una hazaña histórica fue la que completó Novak Djokovic este domingo al conquistar la medalla de oro en los Juegos Olímpicos París 2024, superando a Carlos Alcaraz por un doble 7-6 para agregar a su palmarés el único gran título que le faltaba a su legendaria carrera.
Emocionado, impactado por todas las sensaciones de lograr su gran sueño, el campeón de 24 Grand Slams se derrumbó en la arcilla parisina y celebró con su familia y equipo el alcanzar ese objetivo que se había propuesto desde el año pasado, con un valor adicional por todo lo que vivió en un 2024 en donde no había ganado un torneo y en el que pasó por el quirófano.
«Me preparé para Roland Garros, Wimbledon y los Juegos Olímpicos para ofrecer mi mejor versión. La lesión en el Grand Slam parisino trastocó mis planes, pero disputar la final en Londres me hizo ver que había recuperado mi nivel y que tenía mi gran oportunidad en esta cita olímpica. Por muy fácil que me ganara Carlos esa final, tenía claro que iba a ser un tenista diferente en este torneo. No hay mayor motivación que luchar por tu país, tras ganar los dos primeros partidos sabía que podía hacerlo», confesó el dueño de 99 títulos.
En cuanto a Alcaraz, Djokovic ofreció grandes elogios: «Ganar en semis me quitó un peso de encima porque ya sabía que tenía una medalla asegurada, pero quería el oro. Me enfrentaba al mejor jugador del mundo en estos momentos, a una gran persona con magníficos valores y a un tenista que estoy convencido de que ganará el oro olímpico en el futuro. Tuve que elevar mucho mi nivel y lo conseguí. No puedo estar más feliz, la sensación que he experimentado al ganar el partido no se parece a ninguna otra de las que he vivido en mi carrera», finalizó Novak Djokovic.