El legendario tenista con 24 títulos de Grand Slam, Novak Djokovic, ha regresado triunfante al Masters 1000 de Shanghai. El serbio de 37 años se impuso al estadounidense Alex Michelsen en un emocionante doble 7-6, marcando su primer partido en este torneo en cinco años.
Djokovic, el campeón reinante de este torneo en cuatro ocasiones, expresó su alegría por volver a este prestigioso evento y en la rueda de prensa compartió detalles sobre su equilibrio entre su vida personal y profesional. «Todos tenemos vidas y compromisos diferentes. Es difícil hacer comparaciones, lo que funciona para uno puede no funcionar para otro. Yo intento equilibrar las cosas… no es fácil llevar una vida perfectamente equilibrada», reflexionó.
El tenista balcánico habló de su constante desafío de ser un buen padre, esposo, tenista, hijo y hermano, mientras viaja y compite en torneos alrededor del mundo. «Echo de menos a mi familia cuando viajo, pero al mismo tiempo me encanta el tenis… tengo el apoyo de mis seres queridos para seguir jugando», confesó Djokovic.
En cuanto a su exitosa carrera, el tenista de Belgrado se considera afortunado por todos los logros que ha alcanzado. «He tenido suerte en la vida de haber tenido todos estos éxitos», dijo el número cuatro del mundo. Djokovic destacó especialmente la importancia de su victoria en los Juegos Olímpicos de París 2024 y el emocionante recibimiento que tuvo en su país natal.
«El recibimiento de los campeones olímpicos en Serbia fue algo único, extraordinario e inolvidable… Mi familia estuvo allí para vivirlo en primera persona», recordó emocionado. A pesar de los desafíos, Djokovic destaca la importancia de mantener buenas relaciones con las personas y esforzarse por ser la mejor versión de uno mismo cada día.
En resumen, Djokovic enfatizó la importancia de abrazar el presente, evolucionar y aprender de las experiencias diarias para seguir creciendo, tanto en el tenis como en la vida.