El tenis avanza al ritmo de los tiempos, evolucionando de ser solo una cuestión de estrategia mental y resistencia física a utilizar la potencia que la tecnología ha traído consigo, permitiendo a los jugadores desplegar un juego preciso y milimétrico.
Roger Federer, con sus 103 títulos profesionales, es una voz autorizada en el mundo del tenis. El suizo ha maravillado a todos con su exquisito juego, destacando su revés a una mano como uno de los mejores de la historia, aunque lamentablemente esta técnica está desapareciendo cada vez más de las canchas profesionales.
«Supongo que mucho de esto viene del entrenamiento. Sería genial tener al número uno y al número dos del mundo jugando a una mano, algo que no tenemos ahora, así que eso no va a inspirar a la generación de jugar con revés a una mano», expresó Federer en Berlín, donde se lleva a cabo una nueva edición de la Laver Cup.
El cambio hacia el revés a una mano, según el tenista suizo, debe surgir de la colaboración entre jugador y entrenador, una ejecución que considera fundamental para el futuro del tenis. Además, Federer resaltó las diferencias entre el revés a una y dos manos.
«Creo que son los entrenadores de todo el mundo los que pueden darse cuenta de que algunos jugadores juegan mejor con una mano que con dos. ¿Alguna vez quitas una mano? Esa es la pregunta. El entrenador debe saberlo y el jugador debe tener la urgencia de intentarlo como lo hice yo», explicó Federer.
A pesar de que el revés a dos manos ofrece ventajas en la devolución y defensa, el revés a una mano sigue teniendo su lugar en el juego moderno, según el suizo. También destacó que los jugadores con revés a dos manos hoy en día tienen un slice mucho mejor que hace 20 años.
«Será triste ver cada vez menos jugadores con el revés a una sola mano», confesó el legendario tenista.