Estados Unidos continúa demostrando su poderío en esta edición del US Open. Después de clasificar a dos representantes, Frances Taifoe y Taylor Fritz, para las semifinales masculinas, ha colocado a otras dos jugadoras en la misma ronda en la competición femenina.
Para encontrar una dominación similar por parte de los tenistas estadounidenses en un torneo grande, hay que retroceder hasta la edición del Abierto en 2003. En aquella ocasión, estaban en la lucha por el título Andy Roddick, Andre Agassi, Jennifer Capriati y Lindsay Davenport.
Emma Navarro, quien venció el martes a Paula Badosa, ahora se une a Jessica Pegula, quien derrotó un día después a Iga Swiatek por 6-2 y 6-4. Aunque la polaca se mantendrá como número 1 al final del torneo, desde Roland Garros ha dejado de ejercer como tal.
Pegula es, sin duda, la jugadora del verano. Campeona del WTA 1000 de Toronto y finalista en Cincinnati, ha logrado llegar por primera vez entre las cuatro mejores en el último Grand Slam del calendario. En las semifinales, espera la checa Karolina Muchova, quien eliminó a la brasileña Beatriz Haddad Maia.
«Estoy emocionada por haber llegado tan lejos en este torneo. Ha sido un verano increíble para mí y espero seguir así en las próximas rondas», dijo Pegula tras su victoria sobre Swiatek.
Con cuatro representantes en las semifinales tanto en la competición masculina como en la femenina, Estados Unidos está mostrando su dominio en el tenis mundial en este US Open.